Construyendo el Personaje

2 oct 2022


Manolo Caro, el reconocido actor, que recordamos por papeles como “El Gitano” de Sin tetas no hay paraíso, “Paquillo” de Los Serrano y recientemente por “Sanchís” de Entrevías nos cuenta cómo fue su experiencia en este gabinete:


“He tenido la oportunidad de recibir varias sesiones de asesoría logopédica con María Paula Artunduaga. Acudí a ella cuando me ofrecieron interpretar el personaje de Sanchís en Entrevías. Sanchís es un excombatiente de la guerra de Bosnia con una ligera tartamudez causada por el síndrome de estrés postraumático (TEPT). Las sesiones con María Paula fueron fundamentales para componer con cierto sentido y rigor el habla de este personaje. Comenzamos las sesiones adentrándonos en el mundo de la disfluencia, disfemia o tartamudez. Me explicó las diversas causas que pueden provocarlo, los componentes, sus manifestaciones… Después enfocó con precisión el perfil de habla de mi personaje: combinando el inicio falso, la repetición, la prolongación, el bloqueo…

Encarnar a un personaje con estas dificultades en el habla ha sido todo un reto para mí. No quería, en absoluto, parodiar o exagerar la tartamudez para que resultara algo cómico, como he visto en muchas películas. Por un lado, nuestra intención fue la de encontrar dónde y cómo se atascaba en su habla. Es decir, elegir qué fonemas, palabras y expresiones le podían resultar más complicadas de decir. Y por otro, cuándo lograba hablar fluido, y esto se daba en las expresiones aprendidas o automáticas, como “mi capitán”, entre otras. Supe también, para mi sorpresa, que la disfemia puede desaparecer al susurrar, cantar, leer o hablar en otro idioma.

Confieso que cuando me he encontrado con personas disfluentes, a las que no conocía previamente, he sentido un repentino desconcierto e incomodidad. En más de una ocasión he tratado de ayudarlas, por ejemplo, terminando las palabras que les costaba pronunciar. Gracias a las sesiones recibidas mi actitud ha cambiado al respecto. Ahora trato de comportarme con naturalidad, sin pretender ayudarlas.


También he de decir que, al interpretar a Sanchís en interacción con los otros personajes, a veces, me he sentido incómodo. ¿Por qué? Porque decir mis líneas de texto me llevaba más tiempo y sentía que estaba retrasando el ritmo de la conversación, de la escena, veía la cara de los demás compañeros esperando a que terminara... Imagino que es lo mismo que le sucede a una persona con tartamudez en la vida diaria.


La experiencia y empatía de María Paula me facilitaron enfocar mi tarea con claridad y confianza. Además, en una de las sesiones me presentó a una mujer que tenía una disfemia desde su infancia y había recibido diferentes tratamientos sin una clara mejoría. Ya de adulta inició un tratamiento con María Paula. Mi sensación al estar con ella fue de que su habla era prácticamente fluida todo el tiempo. Su mejora era, sin duda, asombrosa. Esto añadió un plus a mi investigación.


Me siento muy satisfecho y agradecido con el resultado de las sesiones con María Paula. Me ayudó a construir mi personaje con más fundamento y convicción”.

Fotograma de Entrevías